Sin embargo, en México hay escasos estudios de psicología en el contexto cultural 

Mérida, Yucatán, a 23 de enero de 2024.- En México son escasos los estudios desde la psicología que consideran el contexto cultural, el cual indica a las personas las maneras de responder emocionalmente a su entorno, a partir de la normatividad establecida, construida activamente por interacciones, relaciones sociales y sistemas culturales, afirmó la profesora investigadora de la Universidad Intercultural Maya de Quintana Roo, Deyra Jiménez Balam.

Durante la conferencia “Psicología y pueblo maya: El estudio de las emociones y su socialización entre los mayas”, organizada en el marco del mes de la Cultura Maya de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), la especialista señaló que, en su mayoría, el conocimiento científico en psicología está basado en estudios con personas de origen occidental, educada, industrializada, rica y democrática, que representa el 12 por ciento de la población mundial y cuyos resultados se han generalizado al resto de los individuos.

“Muy pocos estudios e investigaciones se han realizado en México y, particularmente en la península de Yucatán, no se ha abordado mucho la cuestión psicológica desde el punto de vista cultural, o sea, se da mucha atención a las comunidades mayas o a la población maya, sin considerar cuáles son sus prácticas culturales en particular y uno de esos procesos son las emociones, las cuales están implicadas en muchos otros procesos psicológicos”, abundó.

En ese sentido, dijo, se cuenta con un amplio repertorio de expresiones con significado emocional que incluyen partes del cuerpo que giran principalmente en torno al corazón, que en su lengua se denomina Óol.

“En la cultura maya no existe la palabra emoción, pero encontramos otro término que se llama Óol en lengua maya, el cual, cuando se conjuga da origen a diversas emociones y sentimientos, pero este no se limita la emocional, sino que implica también cuestiones cognitivas y fisiológicas”, explicó.

La maestra en ciencias indicó que para la comunidad maya el término Óol se denomina energía moral, fuerza vital, ánimo y movimiento, es el centro anímico que da origen a diversos estados.

Por ejemplo, especificó, “Ki’imak óol” es armonía, felicidad y alegría, tranquilidad, felicidad del espíritu y ánimo; mientras que “yaj óol” se define en función como desgano, regulando el sufrimiento en solitario sin esperar que se comparta, porque esto irrumpe en la tranquilidad de la familia o personas cercanas.

Así mismo, mencionó que “p’ujul” o enojo, es percibido para los mayas como peligroso, ya que es un estado alterado y en desequilibrio, su expresión entorpece las relaciones sociales.

Por ello, Jiménez Balam reiteró que en la cultura maya se habla más del ánimo que de lo emocional, lo que regula tanto sus sentimientos como la manera en que se desenvuelven en su entorno desde pequeños.