Share This Article
En un mensaje contundente desde el Teatro de la Republica en Queretaro, sede de los trabajos del congreso Constituyente de 1917, la presidenta Claudia Sheinbaum reafirmó la postura de México en defensa de su soberanía y su independencia frente a cualquier tipo de injerencia extranjera. En un contexto internacional tenso, la mandataria dejó claro que el país no aceptará presiones ni sometimientos de ninguna índole.
México es un país maravilloso, con un pueblo extraordinario, somos una gran nación. En nuestro territorio crecieron culturas originarias que construyeron pirámides monumentales, que entendieron los astros, la vida y la muerte como parte de un cambio constante, que nos dieron y siguen dando lenguas únicas y conocimientos ancestrales que enriquecen nuestra vida y nuestra alma solidaria. México como ningún otro país es grandioso por sus héroes y heroínas que fueron labrando con devoción por su patria, la independencia, la justicia, la libertad, la democracia y la fraternidad eterna.
La Constitución es nuestro escudo para defender a la nación, por eso en estos tiempos en los que aparecen amenazas a nuestra soberanía nacional, en los que el espíritu intervencionista asoma las puertas de nuestra patria, es momento de recordar la historia y nuestra grandeza. México es un país libre, soberano, independiente, no somos colonia de nadie ni protectorado de nadie. Podrán amenazarnos con cometer cualquier atropello, pero jamás permitiremos que viole nuestra soberanía y pisoteen la dignidad de nuestro pueblo y de nuestra patria.
Sheinbaum también abordó la situación de los migrantes mexicanos en el extranjero, asegurando que su gobierno continuará defendiendo sus derechos y exigiendo un trato digno para quienes buscan mejores oportunidades fuera del país.
México es grandioso por su pueblo, honesto, trabajador, que está hoy más empoderado que nunca. México es imponente por nuestros hermanos y hermanas que viven del otro lado de la frontera y que añoramos y reconocemos como nadie, porque nos une, más allá de nuestro vínculo sanguíneo, el amor a nuestra bandera. Que vivan las y los migrantes.
México es una gran nación, México y su pueblo siempre estarán listos para defender a la patria.
La presidenta subrayó que México continuará promoviendo una política exterior basada en el respeto y el diálogo, pero sin permitir que ningún otro país decida sobre sus asuntos internos.
Cooperación, sí, subordinación, no, colaboración, sí, sometimiento, no, nada de injerencismo ni intervencionismo, tampoco de racismos ni de clasismos, sí a la defensa de nuestra Constitución, sí a la defensa de nuestras libertades, sí a la defensa de la democracia, sí a la defensa de la patria. En este 108 aniversario de nuestra Constitución queremos declarar y que se oiga fuerte y lejos que cualquier intención de afectar nuestro derecho de ser un pueblo libre, un país independiente, una tierra soberana, se topará con un pueblo valiente, que sabe luchar para defender sus derechos y a su patria. Estamos unidos, estamos listos para encarar el futuro que nos depara el destino.
En estos tiempos que nos ponen a prueba como nación y como pueblo, queremos recordar la promulgación de nuestra Constitución y la herencia de nuestros ancestros para dar lo mejor de nosotros en la defensa de México y siempre cerca del pueblo. Somos una nación libre, independiente y soberana. México tiene un pueblo valeroso, que sabe estar siempre a la altura de los retos que nos ha impuesto la historia y el porvenir.
Finalmente, la mandataria cerró su mensaje con un llamado a la unidad nacional en defensa de la soberanía.
Que vivan nuestros hermanos migrantes, que viva la soberanía, que viva la Constitución, que viva México libre y soberano, que viva México, que viva México, que viva México.